La disponibilidad de programas académicos en línea es abrumadora, desde cursos individuales hasta doctorados, en universidades nacionales e internacionales, y con un amplio rango de precios, también. La inversión en tiempo y en dinero que va a realizar merece una seria consideración, ya que no todos los programas virtuales son iguales.
- ¿Todos juntos o cada uno por su lado? Hay dos tipos de educación virtual: sincrónica y asincrónica. Es decir estamos todos conectados al mismo tiempo (sincrónico) o cada quien trabaja a su ritmo (asincrónico). El modelo sincrónico se parece más a una clase tradicional, todos estamos conectados al mismo tiempo; de seguir este formato, es indispensable que las conexiones de todos los estudiantes permitan una buena comunicación. El modelo asincrónico tiene la ventaja que cada estudiante trabaja a su ritmo, pero requiere de una mayor compromiso de auto gestión por parte del estudiante. La mayoría de los cursos virtuales impartidos en la región son asincrónicos.
- La Nave. La plataforma es el carro, y hay muchos modelos de carros. Pregunte por la plataforma que utilizan en la universidad. Hay marcas reconocidas como Blackboard y Moodle (gratuita en cierta versión) o propietarias. Solicite una demostración de la plataforma. Las funciones básicas son similares, las diferencias se dan cuando una institución ha adquirido (o desarrollado) versiones premium de la plataforma. Solicite un acceso temporal y navegue el sitio; si bien todas las plataformas requieren de algún nivel de aprendizaje, usted debe de sentir cierto grado de comodidad al navegar la plataforma por primera vez.
- Houston, tenemos un problema. Pregunte qué tipo de servicio tiene la universidad para atender fallas en la plataforma. Usted quiere que la plataforma sea robusta: que tenga una conexión rápida para poder subir y bajar el material del curso, y que sea confiable, para estar seguros que en caso de pérdida de datos, haya un respaldo reciente. Ya el trabajo académico le generará suficiente estrés como para que se tenga que preocupar por la disponibilidad y estabilidad de la plataforma.
- ¿Y los profes?: Pregunte qué tipo de entrenamiento han llevado los profesores que imparten los cursos virtuales. La educación virtual requiere de competencias pedagógicas distintas a las de un profesor de un curso presencial. Pregunte cuál es el tiempo de respuesta de los profesores en cursos virtuales. El curso es virtual, ¡el profesor NO debe de serlo!
- ¿Cuántos somos?: Pregunte cuantos estudiantes hay por grupo. Se recomienda que los cursos virtuales tengan menos estudiantes que los cursos presenciales. ¿Por qué? Porque el curso virtual requiere que el facilitador le dedique más tiempo individual a cada estudiante. Si el curso es académico (en donde recibe crédito académico), lo ideal es tener un máximo de 20 personas. Más de eso, aunque el curso sea virtual vamos a estar muy estrujados.
- ¿Qué vamos a hacer? Pida los sílabos de los cursos, vea cuáles son las actividades que se desarrollaran en el curso. Los cursos virtuales requieren de mucho tiempo, dedicación y disciplina por parte del estudiante. Asegúrese que la carga académica es manejable. Si un curso vale 3 créditos, usted debe de asumir en semanalmente le dedicará 9 horas a ese curso.
- ¿Cómo que no es válido? La virtualidad nos permite que podamos acceder a cursos virtuales en universidades en otros países, pero recuerde que un título de una universidad internacional no es reconocido de inmediato en Costa Rica. Dependiendo de sus necesidades, le será relevante o no que el título que reciba sea reconocido en el país. Siempre puede tramitar el reconocimiento del título, nada más tenga en cuenta que será un trámite (y un costo) adicional; debe de evaluarlo con respecto a la oferta académica existente en Costa Rica.
- ¡Contame cómo es la cosa! Pida referencias. Busque a gente que haya llevado cursos en esa universidad, pregúnteles qué tal ha sido su experiencia virtual, y a cuáles profesores recomienda. Aunque la experiencia no será la misma para todos, entre más pregunte a exalumnos o alumnos de esa institución, estará en mejor posición para tomar la decisión.
Cris Bravo es consultor organizacional, su especialidad es el desarrollo del liderazgo y la gestión del cambio. Es instructor en la Facultad de Liderazgo de la Universidad de San Diego, California, y en la Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad Latinoamericana de Ciencia y Tecnología, Costa Rica.
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